La compañía ENDESA subcontrata a empresas con especialistas en trabajos verticales que se encargan de quitar los contadores del gas de los morosos. Para ello violan todas las normas y leyes: entran sin permiso en las comunidades de vecinos; se cuelgan por los accesos de las escaleras a los patios de luces, también se cuelgan de los tejados y, si es necesario, lo hacen también desde una grúa.
La autoridad no interviene, pese a las denuncias; las prácticas de estas empresas son manifiestamente irregulares en ese tipo de actuaciones que constituyen un atentado gravísimo contra los derechos de los consumidores (porque el moroso también tiene sus derechos, no lo olvidemos). ENDESA no sólo actúa, así, de manera irregular y contraviniendo las leyes, sino que hace uso de otras prácticas atentatorias, como el cobrar los consumos por “estimación”, algo que está rigurosamente prohibido. Otro hábito de ENDESA es aplicar tarifas actualizadas sobre el consumo anterior a la actualización de precios.
La obligación de ENDESA es enviar a sus técnicos a realizar las lecturas de consumo; sin embargo, no lo hacen; en vez de eso dejan una tarjetita para que el consumidor dé una lectura aleatoria o, si lo prefiere, llame al nº de teléfono impreso, con prefijo 902 por cuya llamada el consumidor también ha de pagar.
Ya lo sabéis: ¡a por ENDESA! Ya basta de que reine la ley del más fuerte. Y aplicad este cuento: una avispa no para un tren, pero le puede picar al maquinista.
La autoridad no interviene, pese a las denuncias; las prácticas de estas empresas son manifiestamente irregulares en ese tipo de actuaciones que constituyen un atentado gravísimo contra los derechos de los consumidores (porque el moroso también tiene sus derechos, no lo olvidemos). ENDESA no sólo actúa, así, de manera irregular y contraviniendo las leyes, sino que hace uso de otras prácticas atentatorias, como el cobrar los consumos por “estimación”, algo que está rigurosamente prohibido. Otro hábito de ENDESA es aplicar tarifas actualizadas sobre el consumo anterior a la actualización de precios.
La obligación de ENDESA es enviar a sus técnicos a realizar las lecturas de consumo; sin embargo, no lo hacen; en vez de eso dejan una tarjetita para que el consumidor dé una lectura aleatoria o, si lo prefiere, llame al nº de teléfono impreso, con prefijo 902 por cuya llamada el consumidor también ha de pagar.
Ya lo sabéis: ¡a por ENDESA! Ya basta de que reine la ley del más fuerte. Y aplicad este cuento: una avispa no para un tren, pero le puede picar al maquinista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario