1.1.08

Claro interior, de Ángel Guinda, y la intergeneracionalidad

Aunque Octavio dará cuenta precisa del acontecimiento, no quiero dejar pasar aquí la noticia de la presentación en cierto modo privada de Claro interior, el último libro de Ángel Guinda, gracias al sacerdocio de Octavio Gómez Milián, que reunió en el "Mar de Dios" al propio Ángel y a unos cuantos amigos. En la neo Cavern de Tenor Fleta, 8, de Zaragoza, se leyeron textos de Guinda de ese libro, pero también de otros títulos; poemas que a cada uno nos tocó la fibra en algún momento y de cuya vibración quisimos dejar constancia personal. Pero dejadme deciros que, si esa lectura ya fue importante, lo que me pareció a mí sobre todo destacable fue el hecho de con-certar el gusto y la admiración de tres generaciones vivas de poetas en un acto en el que pudo apreciarse que, en efecto, la conexión sin garrampas, la convivencia sin aspavientos y sin críticas puñaladas traperas es lo que dio auténtico valor a la reunión. Ésta es la clave hoy de la poesía aragonesa de los últimos años: que todos nos sintiéramos enchufados a la misma regleta en conectores distintos. Bravo por Octavio; bravo por Ángel, bravos por Ortiz Albero, Vilas, Serrano, Jiménez, Tajahuerce, Ruiz Fleta, Romeo, Castro... y bravo por los que las anginas y el fiebrón supusieron obstáculos insalvables: Gracia, Saldaña, Trinidad... Otros amigos estuvieron escuchando (como lo hiceron en su día Ralf y Florian en el "Cavern" hamburgués): Sarría, Barreiro, López, Sáenz, Reyes, Irene...

4 comentarios:

Octavio Gómez Milián dijo...

Ese Forega
dándole duro ya a principios de año
un abrazo
octavio

Anónimo dijo...

Gostei muito desse post e seu blog é muito interessante, vou passar por aqui sempre =) Depois dá uma passada lá no meu site, que é sobre o CresceNet, espero que goste. O endereço dele é http://www.provedorcrescenet.com . Um abraço.

Fernando dijo...

Saludos Manolo...espero que escribas con más asiduidad...abrazos de rrmm.

Anónimo dijo...

Saludos también para ti, Fernando. Y un abrazo.
Manolo