28.8.08

Y, ahora, me anuncio yo (no es la primera vez, que conste)


La última «Noche de Juglares» de esta temporada (que realiza El Silbo Vulnerado durante la primavera en el Parque Delicias) ha cambiado la fecha y el lugar para trasladarse al día 5 de septiembre al Pabellón de Zaragoza en la EXPO. Además del magnífico, irónico, crítico, sarcástico Carlos Malicia, estaré yo leyendo mis poemas y proyectaré el videograma lúdico-retórico Bombas fúnebres -con imágenes preparadas por Leónidas Martín Saura- sobre algunas figuras de la preceptiva poética. Será a las 20 horas. Así que ya lo sabéis.

Imagen: "Medusa" de Arnold Böcklin.

«Los poetas tienen la palabra»























Con la participación el día 31 de agosto (barrio de San José) de Emilio Pedro Gómez, se cumplirá la trigésima sesión del ciclo Los poetas tienen la palabra que se desarrolla en el Pabellón de Zaragoza de la EXPO a partir de las 17 horas.
El programa concluye con las siguientes intervenciones en septiembre: Diego Palmath (barrio de San José, día 1); Mariano Castro (Monzalbarba-Alfocea, día 3); Jesús Jiménez (Delicias, día 4); Miguel Ángel Ordovás (Delicias, día 5); y Miguel Ángel Ortiz Albero (Delicias, día 6).
Consecuentemente, habrá intervenido en este ciclo literario un total de treinta y cinco poetas, que han ostentado la representación de los 29 barrios de Zaragoza.

Fotografías: la de Ordovás es una instantánea del programa "Borradores" que dirige Antón Castro; la de Ortiz Albero (que he retocado un poco) es de Rogelio Allepuz en El Periódico de Aragón; la de Castro es mía; la de Palmath la he pillado de su blog y la he recortado; y la de Jiménez -que he cogido de un enlace cualquiera- no sé de quién es (que me disculpe al autor). Sé que acompaña sus Diario de la anemia y Fermentaciones, en Olifante, pero no encuentro el libro en mis estanterías (¡¿quién coño me lo ha cogido!? ¡A ver!)

26.8.08

Una fotografía que me envía Leónidas

DESCENTRÉMONOS


Un café junto a las Murallas con Luis Felipe, o la reciente conversación con Guinda en la cena del 22, un cambio de impresiones en la EXPO con Nacho Escuín o con Ricardo Díez, el encuentro fortuito con Fernando Burbano en la calle Santa Lucía... todas han sido ocasiones en las que se ha abordado el asunto de la descentralización local de la poesía.
Al hilo del programa Los poetas tienen la palabra en la EXPO, que pretende ir adquiriendo otros compromisos no transitorios, han ido surgiendo preguntas acerca de cuáles son las zonas limítrofes de la cultura zaragozana. Y, claro, resulta de un análisis breve la siguiente conclusiva interrogación: ¿por qué ha de haber zonas limítrofes? La inercia espuria respecto a la consideración de dónde y cómo se hace cultura ha ido empujándola hacia el centro apoyada en un discutible prestigio formal. Es decir, que no cabe —o casi— la posibilidad de que una presentación, una lectura, una reunión literarias se deslinden y salgan del núcleo del Centro. FNAC, El Corte Inglés, la Biblioteca de Aragón, la DPZ, polarizan este tipo de acontecimientos. Y está muy bien: que así siga siendo siempre que no dejemos de considerar que toda polarización es muy probablemente ficticia. Por eso unos cuantos (y cada vez más) creemos en la necesidad de ir descentrándonos, de que vaya pensándose en que existen otros sitios que pueden muy bien convivir con el convencionalismo de los "otros". Los que acabo de citar constituyen el mosaico reducido, pero, además, reductor de posibilidades; son las elecciones asumidas mientras ignoramos una gran cantidad de alternativas.
El nuevo cuadro de poetas que está dando lustre al género en nuestro territorio ha considerado como natural la búsqueda y el ejercicio de escenarios distintos, y ello ha sido posible, muy probablemente, a la existencia de un cambio de sensibilidad en el subconsciente colectivo más joven y a las buenas relaciones entre quienes los gestionan y quienes finalmente los seducen con propuestas semejantes. Nos encontramos así con garitos donde la poesía ha tenido cabida con todas sus consecuencias: el Mar de Dios, el Páramo, Candy Warhol, Jane Birkin, Bar Bacharach, son lugares de copas, de música mildecibélica, pero lugares en los que, esporádicamente, la poesía se ha convertido en una praxis "normal" y la ha administrado dentro de un segmento cronológico inédito. Este hecho hay que celebrarlo y seguir alentándolo pensando también en la posibilidad de crear un circuito espontáneo que se una a los clásicos locales heterodoxos como La Campana de los Perdidos y el Bonanza.
Pero esta incipiente desvinculación de la formalidad literaria sugiere otras alternativas que todavía están por explorarse adecuadamente. Si pionero fue el Bonanza y su Manolo como local de café y copas donde cupo la poesía; si, con asiduidad, estabilidad y esfuerzo meritorio de nuestro amigo "Rodo" lo fue también La Campana de los Perdidos, en el nuevo ámbito que proponemos fue El Silbo Vulnerado el que con sus principia inamovibles llevó a los barrios la poesía en sus fisonomías diversas. Lleva El Silbo catorce años de programación con sus "Noches de Juglares" (a las que me he referido aquí más de una vez) en colaboración con la Junta de Distrito y la Asociación de Vecinos de Las Delicias y El Terminillo. Se trata de un ejemplo mayúsculo y prueba tangible del éxito de este tipo de alternativas.
Esos lugares existen. La Administración Municipal dispone en los barrios, además, de locales técnicamente superdotados (los Centros Cívicos) susceptibles de acoger estas propuestas y seguro que más de un local privado estaría dispuesto a dejarse seducir por ellas. Deberíamos ser capaces de promover este tipo de iniciativas; ser capaces de colaborar con los grupos sensibilizados ya existentes en los barrios (como la "Asociación Literaria Rey Fernando" en el Actur, por ejemplo); deberíamos ser capaces de, sobre todo, desprejuzgarnos, de incrementar nuestro grado de desinterés y de generosidad. Propiciar, promover, más allá de lo que ya existe, alcanzar el extremo de lo posible en el ejercicio práctico de la poesía como elemento normalizado de la cultura de los barrios es —me decía Ángel Guinda no hace mucho— "una actividad revolucionaria". Y yo estoy de acuerdo. Hoy lo es todavía más si, como pensamos la gran mayoría, asistimos a una progresiva degradación de los valores humanos y a una enajenación consumista de alcance obstinadamente sedante.
Todas las construcciones humanas —y más las culturales— son combinatorias. Axioma tal se ha hecho realidad en los últimos años en Zaragoza, en Aragón, a través (no dejaré de insistir en ello) de la desatomización beligerante; es decir, a través de la unión de las diferentes sensibilidades dejando a un lado su heterogeneidad morfológica para prestar la incuestionable atención a su procomún humano, a la amistad antes que al distanciador personalismo. En ello estamos de acuerdo casi todos.
Pues manos a la obra. ¿Cómo? Podemos discutirlo; podemos vernos, hablarlo...
Bene vobis!

23.8.08

Leopoldo María Panero: Poesía y prosa







Después de haber cenado con Ortiz Albero, Miguel Serrano, Ángel Gracia, Teresa, Vicente Rubio, Brenda Ascoz, Jesús Jiménez, Raquel y Ángel Guinda y reavivado a Rothko y a Pollock, a Oldenburg y Katz, a Klein y Gorky, a Motherwell, a Tom Wolff...
Odio a Rothko, odio a Pollock, odio a Motherwell, odio a Achille Gorky, a Klein, y a Jack O'Hara, y a Greenberg. ¡Mecagüen la leche! Y me los han colado en la cena, sobre todo me los ha colado el Gracia. Un día de estos subiremos al ring él y yo, a ver qué dice entonces. Pero revivimos a dos Miguelángeles: al Longás y al Encuentra, y sus gratísimos recuerdos siempre divertidos, muy humanos gracias a Gracia. La mesa se llenó de anécdotas guindescas (estos paseos por la memoria prestan el significado auténtico a las sugerencias de Bergson: la vida como un álbum fotográfíco (instantáneas) de palabras, álbums que se intercambian y que nos devolveremos el próximo día) adornadas con algunos pasajes de Panero. Fue una cena, a la postre, paneroica.
Y el Panero más revelador, el iconoclasta, el tránsfuga de su generación, el Panero más escatológico, el fijador de los estremecimientos de la virtus, el libidinoso, el inimitable ejemplar, el modelo del amorfismo, el poliontólogo... Todo esto y más he visto y escuchado esta noche en La Campana de los Perdidos de Zaragoza en la voz y los gestos de El Silbo Vulnerado, en la voz y los gestos de Luis Felipe Alegre y Carmen Orte. Carmen ahondaba en las miradas con las cuerdas suavemente quebradas como olas en los placeres y un sonido enaltecido por la voracidad excelsa de sus ojos.
Lo decía Guinda —y tenía razón—: «Luis Felipe gana con los años». Gana en el escenario, gana en dramatización, gana en transmisión, el mejor conductor de la electricidad de las palabras; con gomina o despeinado, calmo o alterado y con cuatro chismes por toda tramoya, monta un espectáculo hondo, con plomada, buscando los fondos, encontrando al necesario receptor de un señuelo irresistible. Esta noche le brillaban los ojos con cada sintagma, en cada enunciado, en cada pauta que hacía del silencio su afirmación; embutido en negro (como alentaba firmemente Neruda), pausado en un espacio incómodo que Luis Felipe convertía en mayestático escenario, y tan cerca, tan cercano a nosotros, nos prendía del hilo irrompible de la voz. Por él, un Panero veraz, un demiurgo en carne izado, reconocible de inmediato en su encarnación dramática.

Las fotografías son de Forega (Brenda Ascoz, Á. Gracia + M. Serrano); César Sánchez Vázquez (Ortiz Albero); Nati Saura (Forega + Guinda).

19.8.08

Balance provisional de Los poetas tienen la palabra



Cumplidos ya los dos tercios del ciclo Los poetas tienen la palabra, es buen momento —creo— para hacer, aunque apresurado, un primer balance de lo que ha significado y significa esta idea que trata de descentralizar el concepto del ejercicio formal de la cultura entendiendo como tal el que este tipo de actos (lecturas, presentaciones, citas, programas...) sólo encuentren su ubicación axiomática en los locales, salas, salones y foros situados en el centro de la ciudad. Es verdad que algunos grupos reunidos alrededor de la poesía y de las artes desarrollan en determinados barrios una labor en este sentido periódica, dignísima y entusiasta y que, por lo general, se les presta poca o ninguna atención, seguramente debido a un pusilánime prejuicio que establece escalas jerárquicas entre lo "bueno" y lo "malo"; entre lo "interesante" y lo "vulgar", criterio que sigue siendo aleatoriamente proporcional a la arbitrariedad del gusto. Para superarlo, debemos comenzar por ahí, por abolir ese esquema jerárquico.
Los poetas tienen la palabra no quiere quedarse en el contexto de la EXPO. Pretende, por el contrario que, cumplida su experiencia ahí, despierte una sensibilidad aletargada (cuando menos, concite el interés) y pueda tener su continuidad como tarea cultural en los barrios de Zaragoza más allá de su eventualidad. Llevar la poesía a los barrios zaragozanos, preservar la figura del "Poeta del Barrio", desarrollar de forma estable actividades que tengan que ver con la poesía, que los poetas acudan a los barrios, que se descentralicen exentos por completo de cualquier sospecha de paternalismo, son propuestas que pueden llevarse a la práctica con un mínimo de voluntad, un mucho de desinterés y un decidido apoyo de las instituciones.
La poesía no goza en general de las preferencias del "público", pero en esta ciudad advertimos la paradoja de ser un género que —nunca como antes en su historia literaria— se cultiva al margen de los gustos literarios del lector. Zaragoza, Aragón, jamás habían contado con un elenco tan amplio de poetas y que apuntaran tan alto. Una ambiciosa antología de la poesía aragonesa de los últimos cincuenta años sustanciaría un grueso y meritorio volumen que se defendería por sí solo.
Los poetas tienen la palabra no sólo está siendo la prueba de cierta doble osadía: la propuesta de El Silbo Vulnerado y la aceptación del Ayuntamiento de Zaragoza de darle cabida en un acontecimiento que, en su diseño previo, no es proclive precisamente a literatura de esta índole. Se trata, por lo tanto, de una idea inédita, como lo fue, por las mismas razones, la publicación de la muestra plurilingüe 20 poetas aragoneses expuestos o el vídeo Zaragoza poética. La poesía no es espectáculo (aunque es y puede serlo). Por eso mismo no ha merecido la atención de los media, pese a haber sido puntualmente informados. Las gratificantes excepciones han sido las ediciones digitales de Europa Press y El Pollo Urbano y las estupendas crónicas libres de Javier López Clemente.
Los poetas tienen la palabra es prueba también de la vitalidad de la poesía aragonesa. En este ciclo intervendrán finalmente treinta y cinco poetas y, aunque —como es bien sabido—, el catálogo de imperativos determina siempre exclusiones indeseadas o negativas razonables, constituye un ciclo cuyo rol no solapa (al menos no lo ha pretendido) de ningún modo corrientes, estilos o generaciones e incluye, además, a aquellos poetas hermanos llegados de Hispanoamérica que han decidido vivir con nosotros y compartir sus sensibilidades.
Por otra parte, el desarrollo estricto del este ciclo ha conocido, como era de esperar, diversas fisonomías, distintas actitudes, diferentes compromisos del público. Desde su inauguración por Fernando Burbano el 20 de junio, ha supuesto, en todo caso, la oportunidad de conocer en detalle cada uno de los barrios zaragozanos desde una perspectiva —la poética— no convencional y de escuchar la voz de los poetas; de trasladar al auditorio unas voces inhabituales que nada tienen que ver con el puro espectáculo, sino que atañen directamente a la sintaxis del corazón. Y este hecho es en sí mismo muy importante.

18.8.08

Continúa el programa Los poetas tienen la palabra en la EXPO 2008













El programa impulsado por El Silbo Vulnerado Los poetas tienen la palabra que se desarrolla en el Pabellón de Zaragoza de la EXPO 2008 y que reúne a los barrios de la ciudad con los poetas aragoneses, prosigue durante este mes de agosto con las intervenciones de Ángel Guinda (Las Fuentes, día 22); Nacho Escuín (Las Fuentes, día 23); Pilar Peris (Miralbueno, día 24); Ricardo Díez (Torrero, día 25); Carlos Bozalongo (Torrero, día 26) y Emilio Pedro Gómez (San José, día 31). Todas las sesiones comienzan a las 17 horas.



(Las fotografías de Guinda y Bozalongo son mías; la de Pilar Peris, de Columna Villarroya; la de Ricardo Díez es de Rafael Aparicio Chávarri; la de Emilio Pedro Gómez, de Samuel Gómez Velilla; y la de Escuin la he pillado de un enlace que no dice nada de autorías).

La golfa calabresa (relatillo erótico)


Un error, el albur. Destino inefable que revela cuántas realidades ignoradas. Dirigirse a un encuentro con la novia de siempre (o con la novia), embebido en un hilván de imágenes describiendo una noche larga, un amanecer virtuoso en medio del rocío que humedece las matas tras un delicado tránsito por los pliegues de las carnes más entreteladas y más eréctiles masajeadas a prudente distancia del río (cima del exotismo para una "pija"). Todo armónico y suave, equilibrando el tempo, temporizando el gesto, los gestos a los que debía sujetarse una promiscuidad de calculado ritmo en sus fases, en el rito previo, en la contención de los sonidos, en el esparcimiento de los aromas. Un sueño oasísaco, paradigma del novio pijo embutido en un pellejo de dilemas.
Y, de pronto, ¡zaca! Yerro morro-cotudo, desvío mal señalado, carretera desconocida... y una puta que te para, porque, si no paras, te la llevas por delante. Una puta enorme, musculosa, que te « invita» a salir del coche (porque, si no sales, allí mismo lo desguaza). Sales, minúsculo frente a esa mole que blande un cuchillo con el que va segando, pelo a pelo, el vello de su pubis triangular y majestuoso. Ya no te cabe ninguna duda (se te han caído los pantalones); una mano acerada hace presa en tus cojones indispuestos (un escorzo psicosomático ha vulnerado su morfología) y, abriéndose paso a duras penas, el pene incipientemente endurecido aparece entre los dedos milagrosos de la mano putativa (espúreo tocamiento éste, pues a nadie que no fueran mis novias permití semejante e indebida apropiación) y comienza a crecerse ante la adversidad bien disimulada. Su fuerza es descomunal, la del pene menos, pero arrea dignamente. Sueltas imperativamente la pasta por adelantado (no hay otra manera: pagas sin garantía y sin conocer el resultado). Una puta digna y leal, honradísima por sí misma y en el cumplimiento de su tarea, te amenaza con una succión de la que, probablemente, no saldrás vivo. Con un morro ampuloso y una voz surgida de lo profundo, allí mismo te iza con sus brazos y te ordena permanecer inmóvil; te echa sobre una mesa previamente dispuesta para la ocasión. El cuchillo se aproxima, hiere primero el aire, luce dorado con el sol del ocaso... y te encomiendas. La verga, sin embargo, sigue tiesa como un boj templado al viento, y no sabes por qué es así (detalle baladí ante lo que se te viene encima). Allí caen primero como frutos agitados dos sandías que te ciegan y un piercing de acero que te siega la pelambrera del pecho (pierdes de vista el cuchillo) y sientes de repente el frío de una hoja metálica que te arrasa el vello del pubis y lo deja limpio como el de un muñeco. De inmediato, con un gesto sumado al gemido liberado de la ansiedad contenida (¡vaya!, se me ha ido el salto al cieno con el ritmo, y los determinantes y los adjuntos), las fauces del bellísimo monstruo arrojan su cálida lava sobre el rigor de Venus y comienza el guiso para concluir en pitanza: macerado, a la plancha, con salsa prima, en adobo, al horno, con queso fresco y huevos duros... músculo polifacético adherido a la sabiduría culinaria de la energúmena que se chupaba... lo que se chupaba.
Ahíto, duermes en el coche al que no sabes cómo has llegado. No puedes pisar los pedales (porque tienes los aductores destrozados) y, en mitad del camino, junto a los árboles que a aquel salón sirvieron de baldaquín, ya no hay nadie. La caníbal se ha ocultado hasta la tarde. Junto a ti, una nota: « Este banquete sólo te lo puedo ofrecer una vez al año».

16.8.08

Los poetas tienen la palabra (en la EXPO)















Los próximos días 17 y 18 de agosto, intervendrán, respectivamente, Miguel Carcasona y Javier Barrero en el ciclo "Los poetas tienen la palabra" que promueve El Silbo Vulnerado dentro de la programación del Pabellón de Zaragoza dedicada a los barrios de la ciudad. Miguel Carcasona representará a San Juan de Mozarrifar-San Gregorio y Javier Barreiro a La Cartuja-Torrecilla de Valmadrid.

(d.a. es el autor de la fotografía de Miguel Carcasona, y está tomada del
Diario del Alto Aragón; pero ignoro quién es el autor de la de Javier Barreiro).

12.8.08

El Silbo Vulnerado y Leopoldo María Panero

















20, 21, 22 y 23 de agosto, en La Campana de los Perdidos (Prudencio, 7) de Zaragoza, El Silbo Vulnerado, con Luis Felipe Alegre y Carmen Orte, presenta "El Traficante de Palabras". Poesía y prosa del acaso mejor de los novísimos; desde luego, el más radical: Leopoldo María Panero (Madrid, 1948).
Las sesiones comienzan a las 22 horas el miércoles y jueves, y a las 22,30 horas el viernes y el sábado.
Luis Felipe Alegre es uno de los más entusiásticos defensores de la obra de Panero y es, además, uno de sus mejores conocedores. Así que las noches están servidas.

En el silencio un áspid
muerde tu cuello: y cae

la ceniza del cigarrillo sobre el poema.


(Piedra negra o del temblar, Madrid, Libertarias/Prodhufi, 1992)

(La fotografía de Panero está tomada de la contraportada de ese libro, en la que no consta autoría).

9.8.08

Los poetas tienen la palabra. EXPO Zaragoza: Gabriel Sopeña

El miércoles 13 de agosto será Gabriel Sopeña el poeta que intervendrá en el ciclo Los poetas tienen la palabra. Como siempre, a las 17 horas y en el Pabellón de Zaragoza. Leerá sus poemas, pero también nos contará cosas de su barrio de Casablanca.









(La fotografía es de Daniel Loewe/Zoom)

4.8.08

Un finde largo con poesía saliendo a borbotones en la EXPO















Los días 7, 8, 9 y 10 de agosto continúan las intervenciones dentro del programa Los poetas tienen la palabra que promueve El Silbo Vulnerado en el Pabellón de Zaragoza de la EXPO. Además de la lectura de sus poemas, Fernando Sanmartín y José María Barceló (día 7); Eduardo Fariña y Octavio Gómez Milián (día 8), hablarán el barrio Universidad. Alfredo Saldaña y Alonso Cordel (día 9); Cristina Járboles y Rolando Mix (día 10), lo harán del Casco Histórico.

(La fotografía de Saldaña es de Columna Villarroya; la de Gómez Milián es de Fernando Monzón y la de Cristína Járboles lo ignoro.)

1.8.08

Leopoldo Alas ha muerto esta tarde

Leopoldo Alas acaba prácticamente de morir; hace apenas cuatro horas que nos ha dejado, hoy, día 1 de agosto. Me llama Carla para comunicármelo: una brutal neumonía.
Aquí dejo un poema como modesto homenaje a su memoria escrito por un jovencísimo Leopoldo (tenía entonces 25 años, como muestra la fotografía) y que apareció en Olifante recogido en el volumen Los Palcos


POEMA PARA UN LETARGO


Por un anhelado descanso
entre las brumas de un palacio
condenado al sueño eterno.
Para evitar el infierno
que se dilata despacio
entre los hombres despiertos.
Y estar bellamente durmiendo
en espera del beso.
Maléfica está meditando en su cueva.
El príncipe existe y no llega.

(la foto es cortesía de Olifante)

Los poetas tienen la palabra

El día 4 de agosto -a las 17 horas, como siempre-, subirá al escenario del Pabellón de Zaragoza en la EXPO Julio Espinosa